Cante: Montse Cortés. Guitarra: José Fernández ‘Petete’. Cajón: Fran Núñez. Bajo: Joan Masana. Teclado: Petaca. Lugar: Sala La Cochera Cabaret de Málaga. Día: Viernes, 22 de enero de 2016. Aforo: Lleno.
Descubierta por Antonio Canales, ha acompañado a otros grandes del baile, como Sara Baras o Joaquín Cortés. Pero fue su colaboración con Paco de Lucía la que dejó un recuerdo indeleble en los buenos aficionados a este arte. Ahora, vuela libre con tres discos en su haber, el último de ellos, ‘Flamencas en la sombra’, en el que reivindica a cantaoras que, pese a no haber tenido la debida repercusión, aportaron su impronta. Ofreció un recital con quiebros de voz que pellizcan el alma y se marchó entre aplausos.
Principió por tonás, con las que encandiló al respetable, pese a tratarse de un cante menos digerible para el público en general. Esbozó, acto seguido, un guiño a su colaboración con el genio de Algeciras en su disco ‘Cositas buenas’, que se vio interrumpido por un problema de sonido, rápidamente subsanado. Prosiguió con una soleá por bulerías, dulce e hiriente a un tiempo.
Salpicó su actuación de tangos, rumbas y canciones aflamencadas que hicieron las delicias de los presentes, que le brindaron una gran ovación cuando interpretó la rumba ‘Nuestros sueños’, de Camarón, a la que siguió su particular homenaje ‘A Tina‘, de Las Grecas, y al sonido Caño Roto.
Desempolvó una canción por tangos (‘La noche’) de su disco de debut, ‘Alabanza’, en la que mostró su exquisita sensibilidad y los múltiples matices de su voz y dijo adiós evocando nuevamente al de la Isla con ‘Viejo Mundo’. Para los bises, se sacó un as de la manga: Invitó al escenario a la malagueña Genara Cortés, contundente y racial, que prosiguió por bulerías. Y, como guinda a una noche de compás con pellizco, una pataíta a dúo.
Fotos: Paco Lobato
