ENTREVISTA A PACO ROJI, COAUTOR DEL LIBRO ‘LA REPOMPA DE MALAGA’
En Los Vargas, grupo del que formó parte, se apreciaba una verdadera hermandad entre ellos en las fotos. ¿Has podido constatar que así fuera?
Sí, los compañeros con los que he tenido oportunidad de hablar me lo han asegurado; el ambiente entre ellos, y en el barrio, era de auténtica hermandad.
A la hora de recurrir a las fuentes, a los testimonios de los protagonistas o gente cercana a La Repompa, ¿encontrasteis una fácil colaboración u os tuvisteis que ganar su confianza?
Siempre ha habido mucha disposición por parte de familiares y amigos a los que le hemos solicitado alguna información, datos o imágenes. Es importante saber expresar lo que uno está haciendo para que ellos se hagan partícipes también del trabajo.
¿Cuánto tiempo os ha llevado preparar este libro, tan bien documentado?
Seis años de duro trabajo, empezamos en el año 2006, y hemos finalizado en 2012.
En esta biografía, está muy presente la idea de que los cantes de La Repompa son, en realidad, una recreación de los de La Pirula, que, paradójicamente, La Repompa no escuchó directamente de ella. ¿Podrías explicarlo?
Dolores Campos Heredia ‘La Pirula’, madre de la cantaora-bailaora, fallece en 1948, cuando la Repompa contaba con 10 años. Pudo escucharla, claro que sí. Pero, el sello que dejó en sus grabaciones es de una artista propia, de saber de dónde coger (de La Pirula, de su hermana Paca, de Miguel de los Reyes…) pero llevándolo a su eco, a su expresión. Así, ella dejó siete cantes grabados, que son imposibles de igualar.
“Pudo escuchar a La Pirula, pero dejó grabados
siete cantes imposibles de igualar”
Se recoge en la obra una afirmación de Fosforito en la que el maestro asegura que quien quiera saber algo de los cantes de La Repompa debe escuchar lo que grabó Miguel de los Reyes.
Sí, esa afirmación me la hizo uno de los días que nos cruzábamos en el puente de calle Mármoles. Tomé nota y una de las líneas de trabajo ha sido esa. Igual que los cantes de Joaquín Vargas ‘El Cojo de Málaga’ y otros. Málaga tiene mucho que investigar sobre nuestras raíces. Miguel de los Reyes nace y se cría en el barrio de la Cruz Verde, y se relaciona con todos estos chavales. Para muchos de ellos, Miguel era su ídolo.
Se alude muy de pasada en el libro a la relación de La Repompa con Farruco. ¿Podrías aportar algún dato o comentario sobre ella?
Por todos era sabida la relación existente entre ambos. La Repompa trabaja en Sevilla en 1955 y, posteriormente, trabaja en Madrid, en los tablaos de aquella época, y es verdad que mantiene una relación esos años, de la que nace una hija de ambos, llamada Rosa.
Muchos se sorprenden al saber que Camarón era admirador de La Repompa y que incluso se inspiró en ella para realizar alguno de sus cantes.
Es asombroso, pero real; Camarón era un admirador de Málaga, de su gente y de nuestros cantes.
Sorprende, asimismo, que otros grandes cantaores como Mairena, Chocolate, Carmen Linares o Miguel Poveda, por citar algunos (Porrinas de Badajoz o Ketama también la homenajearon), hayan interpretado los cantes de La Repompa. ¿A qué lo atribuyes? Resulta cuando menos sorprendente cuando murió tan joven y apenas dejó un puñado de cantes grabados. (En el caso de Mairena, parece ser que los escuchó directamente de La Pirula, con la que coincidió trabajando).
El poder de su voz, ese eco tan gitano y esos registros, que la hacen única. 75 años después es una figura del cante flamenco. Es un reconocimiento a su figura por parte de artistas que saben que los antiguos tienen la clave para conocer el Flamenco.
“Es asombroso, pero real, que Camarón
era admirador de La Repompa”
También se asegura en el libro que hay una vinculación de los cantes de La Pirula y La Repompa con el Campo de Gibraltar. ¿Podrías arrojar luz sobre el particular?
Desde siempre ha habido mucha cercanía, tanto física como laboral. Hemos ido a trabajar allí y ellos lo han hecho aquí, en las ferias sobre todo. Muchos eran lo que tenían también familiares viviendo en aquella zona.
Se reivindica en la obra que Málaga, asociada habitualmente a los primigenios verdiales, a la malagueña y los abandolaos, también cuenta con una tradición consolidada de estilos festeros (bulerías y tangos), localizados en ciertas zonas muy concretas de la ciudad.
Era obligado reconocer zonas como la Cruz Verde y el Perchel-Trinidad, donde desde siempre se ha cultivado el cante por fiesta. Al ser asentamientos gitanos, ha proliferado más este tipo de cante. En el Perchel-Trinidad, los tangos y en la Cruz Verde, las bulerías.
Si no hubiera fallecido tan prematuramente (con sólo 21 años), todo apunta a que La Repompa hubiera sido una primera figura de este arte. ¿Lo crees así?
Lo hemos hablado muchas veces y estamos convencidos de que hubiera sido una figura de la talla de La Paquera de Jerez, La Perla de Cádiz o las hermanas Fernanda y Bernarda de Utrera, con las que pudo codearse en aquellos años.