La Encina Flamenca 2022. Cante: Antonia Fernández y Rocío Mayoral. Guitarra: El Perla. Lugar: Peña La Encina de Encinas Reales (Córdoba). Día: Sábado, 5 de noviembre de 2022. Aforo: Lleno.
Antonia Fernández y Rocío Mayoral llegaban por primera vez a La Encina Flamenca para registrar el sello de su cante en esta Peña Flamenca. Con un lleno absoluto se volvió a colgar el cartel de aforo completo, se notaba en el ambiente que había ganas de cante con personas venidas de toda la comarca y de las Peñas Flamencas desplazadas de los pueblos vecinos, Benamejí, Cartaojal, La Parrilla, Lucena, etc.
Un recital mano a mano con dos voces y estilos distintos arropadas por la guitarra de El Perla. Con un escenario presidido por Pastora Pavón y Paco de Lucía comenzó a cantar Antonia, se templó por zambra, al aire, andando desde el camerino y la finalizó al subirse al escenario. Ya estaban los vellos de punta de emoción en el público.
A continuación, bulerías por soleá a cargo de Rocío, fuerza y compás demostró la onubense en este cante. Ahora el turno para la almeriense, seguiriyas con una dedicación especial al Tío Juli de Cabra que estaba entre el público y al que tanto se le quiere en esta entidad. Aquí Antonia saco su eco de voz y puso con este cante la noche aún más flamenca todavía. Para finalizar la primera parte, tangos mano a mano entre las dos, cada una con su timbre y su estilo que fundieron para dejarlo de regalo grabado en el alma de los presentes.
La segunda parte la comenzó Rocío por malagueñas, con una sensibilidad especial que supo mecer al respetable para hacerlo sentir entre la mejor de las mimbres (“Pensando en ti desvarío”) y remató con abandolados. Ahora Antonia, por alegrías (“Escuchando a los viejos, por qué cambian los tiempos y no las personas”), su eco de voz calaba cada vez más en los huesos. Turno para la onubense sacó el catálogo de fandangos de Huelva dejando grabados en las paredes del local los cantes de su tierra.
Fin de fiesta por bulerías, para poner el broche a la noche forjando nuevamente las dos voces en un mismo cante. Y para terminar unos fandangos a cargo de Antonia. El respetable las despidió en pie, entre aplausos, bajo la atenta mirada de Pastora que seguro estará orgullosa de esta noche flamenca. Toda la noche con un ir y venir de Almería a Huelva y de Huelva a Almería y un Perla en medio del camino, impartiendo una cátedra de toque, de acompañamiento, compás, fuerza, sensibilidad y no sé cuántas cosas más, curtido en mil y una batalla, nos hizo sentir que tocó la séptima cuerda de la guitarra, si es que alguna vez la hubo.