XVIII Aula de Flamenco de Málaga. Baile: Carmen Camacho y Julio Ruiz. Cante: Fabiola Santiago y Rosa Linero. Guitarra: Francisco Martín Cerdán. Lugar: Centro Cultural Provincial María Victoria Atencia de Málaga. Día: Lunes, 28 de junio de 2021. Aforo: Lleno.
Manuel Fernández Maldonado toma la palabra para presentar la quinta actuación de la XVIII Aula de Flamenco de Málaga, que con el espectáculo de este lunes se toma unas vacaciones hasta finales de septiembre, en concreto el día 27 con Amparo Heredia. Le seguirán el 25 de octubre José de Chaparro y Rocío Gil, con la guitarra de Chaparro de Málaga y el 29 de noviembre se cerrará el ciclo con el Cuadro Flamenco de Luisa Palicio.
Fabiola Santiago rompe el hielo con un romance, acompañada por Rosa Linero y la guitarra de Francisco Martín Cerdán. A renglón seguido, con un solo de guitarra, Cerdán muestra su maestría y buen hacer. No en vano este tocaor cuenta con una dilatada experiencia en el acompañamiento y como profesor de la Escuela de Flamenco Antonio de Canillas de la Federación de Peñas Flamencas de Málaga.
El cante y la sonanta dan paso a un impresionante taranto, de baile sobrio y recogido, en el que Julio Ruiz, camisa negra y lunares blancos, atrapa nuestra atención. Su marcado carácter emocional, hace que éste sea un palo de gran belleza para el espectador y cuando está tan bien interpretado al baile nos encandila.
Acompañada del cante por caña hace su aparición Carmen Camacho, con su deslumbrante mantón, con el que baila y al que hace bailar ¡Qué elegancia y sensibilidad! “To er mundo le pide a Dios la salud y la libertad// y yo le pío la muerte; no me la quiere mandar”. Camacho entiende el flamenco como una forma de vida y esto aúna sentimiento, comunicación, expresión… Tiene como fuente de inspiración a La Lupi, su maestra y a la que admira, y también a Eva la Yerbabuena, Manuela Carrasco o Carmen Amaya.
Unas bulerías, bien interpretadas a dúo por Fabiola Santiago y Rosa Linero, dan una pequeña pausa al baile. “… Le tengo envidia a las olas// porque se encuentran tan lejos// como yo de tu persona”.
Los tangos ponen fin al espectáculo; la bailaora malagueña inicia el baile y Julio Ruiz toma el relevo. Sus movimientos sobre el escenario son la mejor explicación de unas palabras de la bailaora: “El baile siempre cuenta cómo eres… Creo que no me parezco a nadie, no intento imitar ningún estilo de baile. Cada uno baila como es; el baile no disfraza”.
Esa autenticidad en el baile, en el cante y en el toque es la que el público ha podido disfrutar esta tarde y, por ello, despide en pie a los artistas con una gran ovación.
Fotos: Laura di Benigno (Universo Flamenco).