‘CasaBarquera’. Cante: Isabel Guerrero. Guitarra: Andrés Cansino. Percusión: Miguel El Nene. Día: Martes, 21 de julio de 2020. Lugar: Azotea del Ayuntamiento de Fuengirola (Málaga). Aforo: Lleno.
Isabel Guerrero presentó anoche su espectáculo ‘CasaBarquera‘ en un lugar con encanto como la Azotea del Ayuntamiento de Fuengirola. Se trata de un recorrido sumamente emotivo por sus vivencias y su aprendizaje de los cantes, en el que homenajea a su padre y maestro, Barquerito de Fuengirola, con el alma de par en par.
Abre con granaína y malagueña, especialmente emotiva la segunda, dedicada a su madre. Prosigue por alegrías, que le brinda a su tierra y a su progenitor, Barquerito de Fuengirola, allí presente. «Del rebalaje vengo, de las protegidas, Barquera para toda la vida…» Una preciosidad.
En su repaso a su trayectoria vital, rescata Mi Málaga cantaora, bellas bulerías de su disco de debut Patio viejo, que presentó en su día en la Bienal de Málaga. «Es.un tema compuesto cuando trabajo fuera, donde llevo a gala a mi tierra’, explicó. En ellas cita a las Lámparas Mineras malagueñas, entre ellas la de su padre, y a otros estandartes del cante de Málaga: El Niño de las Moras, La Repompa y La Cañeta.
A continuación, en su periplo por CasaBarquera, se detiene en una cajonera existente en la habitación de su padre, «de la que yo me enriquecía; de allí nace un cante y un espectáculo precioso. Os abro un cajoncito de esa cajonera, los tangos de La cajonera de los cantes». Pellizcando, abre su alma de par en par.
Continúa en esta línea evocadora e intimista por soleá, magistralmente acompañada por Andrés Cansino al toque y con Miguel El Nene marcando el compás como un metrónomo. «De su garganta y su duende, su cante yo he heredado… Y en sus rodillas yo lo aprendí».»Ole, ole y ole», jalea Barquerito. «Ole la más hermosa de España», le espeta su hijo.
Juana La Petrolera, su abuela paterna, le ha inspirado su espectáculo homónimo aún inédito por las circunstancias, pero ofrece un adelanto con la bulería La Petrolera. «Espero que os esté gustando porque nace desde dentro de mi alma», asegura.
Dice adiós por fandangos evocando a su madre, que falleció siendo ella una niña. «Que nací en Fuengirola, hija de padres flamencos, el cante lo llevo dentro. Soy la hija del Barquero«. Los vellos como escarpias. El público enhiesto le agradece su absoluta entrega. Y ella les concede una pincelaíta por rumbas.
Fotos: Pellizco Flamenco