Te has ido demasiado pronto, amigo Juan Gómez (Fuengirola, Málaga, 1955). Una amiga común me avisó hace unos días de tu enfermedad y eso amortiguó el mazazo que ha supuesto la noticia de tu fallecimiento esta mañana.
Los designios divinos escapan al entendimiento humano. Como bien dice Emilio Carrillo, «todo en esta vida tiene un porqué y un para qué». Sólo puedo decirte, amigo Juan, gracias por haber formado parte de mi vida. A tu lado viví momentos memorables, que nos regalabas cantando como nadie por Paco Toronjo o por El Cabrero.
Fuimos compañeros en la Directiva de la Peña Unión del Cante de Fuengirola-Mijas, con la que te volcaste siempre que se te requería. Pero también fuiste socio de la Peña Amigos del Flamenco de Almáchar, donde también me consta que te querían mucho.
Y es que te hacías querer, porque a tu condición de gran aficionado y estupendo cantaor unías tu bonhomía. Por todo ello, amigo Juan, te vamos a echar mucho de menos. Y cuando dos hablen mientras alguien esté cantando o tocando la guitarra, resonarán tus palabras: «¿Vosotros desde cuándo no os veis?». Para recordarte con una sonrisa, amigo Juan Gómez, flamenco de corazón.
Fotos de Juan Gómez con Diego Morilla: Pellizco Flamenco
