El LXVII Potaje Gitano de Utrera, que organiza Hermandad de Los Gitanos utrerana, homenajeará a Pansequito y Aurora Vargas, pareja artística y vital.
La organización del Festival aduce que “Pansequito y Aurora Vargas son dos de las figuras indiscutibles del arte flamenco, dos de las grandes voces jondas de esta época, dos intérpretes singulares y de calidad que han logrado armonizar sus
aportaciones personales y renovadoras al flamenco manteniendo el respeto a la tradición. Ambos han forjado una trayectoria artística que es
extraordinariamente reconocida y elogiada por el público, la crítica y sus compañeros de profesión».
Pansequito celebra este año su sesenta aniversario como cantaor profesional, un logro infrecuente en la historia del flamenco. Desde aquel 1963 en el que debutó en la inauguración del madrileño Tablao Los Canasteros de la mano de Manolo Caracol hasta el momento, el portuense ha estado ininterrumpidamente en activo consolidándose paulatinamente como una figura esencial y una referencia para las generaciones posteriores. «Y el Potaje Gitano de Utrera quiere unirse a esta efeméride -reza la nota del Festival- ofreciéndole un reconocimiento que el artista gaditano se ha ganado con creces tras su dilatada y brillante trayectoria artística, que lo ha encumbrado como uno de los cantaores más influyentes, personales y carismáticos de todos los tiempos».
«El Potaje Gitano se homenajea a sí mismo -prosigue el comunicado- distinguiendo a dos voces únicas, reconocibles, inimitables. Frescura gaditana y color sevillano. Pansequito transmite la templanza del maestro que va a dictar unas lecciones de cante ya con la sabiduría adquirida. Sonido propio, tercios interminables y compás exacto. Y Aurora sigue siendo un arrebato que se come el escenario, la fiesta que nunca termina, el flamenco dionisíaco, que es su seña de identidad. Pansequito y Aurora, Aurora y Panseco; tanto monta, monta tanto… Y es precisamente a su celebrada unión como pareja sentimental y artística, tan bien avenida para el flamenco, a la que la entidad organizadora quiere mostrar su tributo, reconocimiento y agradecimiento con este esperado y sentido homenaje. Porque en el mundo flamenco existen binomios que son tan imprescindibles como inolvidables. Y Pansequito y Aurora Vargas son una leyenda viva del flamenco, una pareja mítica y vital en este arte que nació en trasnoches y tablaos y que hoy en día es una de las músicas más demandadas en los espacios culturales; ellos han vivido el trasiego de nuestro Patrimonio de la Humanidad, conviviendo con los viejos y los nuevos valores de una cultura donde sólo sobrevive lo auténtico, como ellos mismos. Por sus formas de ser y de hacer, Pansequito y Aurora forman la pareja más jonda y cabal del flamenco actual. El cantaor y la cantaora-bailaora llevan media vida unidos por este arte, recorriendo los escenarios más importantes de todo el mundo. El cante de Panseco colma de personalidad cada tercio desde los compases más rancios hasta los más festeros, y su compañera Aurora adorna con gitanería y poderío el flamenco más ortodoxo renovándolo con su aire oscuro y bravo. Juntos forman una pareja exquisita para viajar por la historia del flamenco del último medio siglo».
