Dulce embeleso Granada,
perlas de cristal sus fuentes
mora se alza la Alhambra
y llora pura la noche
en el alma de la zambra.
Granada novia querida,
perfume del Albaicín,
llevo tus flores prendidas
y el agua del río Genil
para curar mis heridas.
En las fuentes de la Alhambra
se puso a beber el sol,
al compás de la guitarra
bailaba el agua sonora
con cantos del ruiseñor.
Siempre sueño el mismo sueño
cuando me voy a dormir,
que me enamoro en Granada
y llevo el alma bañada
por el Darro y el Genil.
Encarna Lara (Del libro inédito ‘Al compás de la rima’)