‘Flamenco en el Museo’. Cante: Aroa Soto. Guitarra: Luis El Salao. Cante y baile: Bastián Soto. Baile: Elena Molina. Lugar: Peña Juan Breva de Málaga. Día: Jueves, 1 de noviembre de 2018. Aforo: Lleno.
Descendiente de la saga de Los Bizcos, Aroa Soto, con sólo veintitrés primaveras, canta con pellizco y mucha enjundia, como demostró en la soleá inicial. Transmite. Ofreció un recital, en la Peña Juan Breva, en el que ella y su cuadro gustaron y se gustaron, no en vano cuando un artista se encuentra a gusto en el escenario y disfruta de lo que hace, logra transmitirlo al respetable.
Se incorporan su progenitor, Bastián Soto, y Elena Molina. Por bulerías, Bastián canta y baila con esa naturalidad propia de quienes llevan el arte en la masa de la sangre.
Por tangos, Aroa Soto evocó a La Repompa y a La Niña de Los Peines, arropada por la sonanta flamenquísima de Luis El Salao.
Turno para Elena Molina («flamenca picassiana y libre», según Bastián Soto) por alegrías. Es el suyo un baile de inspiración, muy sentido.
Vuelve Bastián Soto con ‘Don Diablo’, de Miguel Bosé, por bulerías. La esencia de la fiesta en estado puro.
Y, a continuación, bulerías a dúo con Elena Molina. Bellísima estampa la que conforman.
Antes del fin de fiesta por bulerías, Aroa Soto ofreció una pincelaíta por bulerías pa’ escuchar. Cualquiera podría asegurar que es natural de Jerez y pasaría como tal, pero no, es de la malagueña Calle Los Negros, cuna de flamencos ahítos de compás.
